El presidente de la República Checa, Milos Zeman recurrió al sarcasmo para responder a una pregunta durante una rueda de prensa celebrada este viernes, asegurando que él es un "agente" de Rusia y de su presidente, Vladímir Putin, informa el portal checo Echo24.
Durante la conferencia de prensa, en la que Zeman anunció oficialmente su candidatura para las elecciones presidenciales de 2018, una periodista rusa le preguntó sobre su actitud hacia Moscú en el futuro. Y Zeman, que ha sido criticado por sus relaciones amistosas con Rusia y aboga por levantar las sanciones antirrusas, ironizó sobre el tema de los 'agentes secretos' y la paranoia occidental al respecto.
"En cuanto a su pregunta, usted sabe, yo era un agente ruso, en concreto de Vladímir Putin", bromeó el presidente checo, que prosiguió: "Tengo que añadir que también soy un agente del presidente chino", dijo, añadiendo que ahora también es agente del presidente de EE.UU., Donald Trump, así como un antiguo agente de Israel.
Luego, ya en serio, el mandatario checo precisó que es solo un 'agente' de su país, la República Checa. Contestando a la pregunta de la periodista, Zeman reiteró que quiere poner fin a las sanciones antirrusas, que los países de la UE, EE.UU. y otros países occidentales impusieron a Rusia a raíz de la escalada de la crisis en Ucrania en 2014.
Las acusaciones de Occidente sobre las presuntas conexiones entre Moscú y Donald Trump y la existencia de supuestos 'agentes' del Kremlin sigue en pie, con las técnicas que remontan a la época de la Guerra Fría. El exdirector de la CIA, Michael Morell incluso sugirió el pasado mes de agosto que "Putin había reclutado a Trump como un agente de Rusia".
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